La incorporación de las aguas subterráneas al sistema de abastecimiento de agua Madrid mediante los acuíferos terciario detrítico y cretácico carbonatado supuso un hito importante en la gestión de los recursos hídricos, ya que permite disponer de un mayor volumen de agua con la que hacer frente a las necesidades en los periodos de sequía, cuando disminuyen los volúmenes almacenados en los embalses superficiales. De este modo se puede hacer un uso sostenible y más eficiente de los mismos.
Litológicamente está constituido por una alternancia de arenas, limos y arenas arcillosas englobadas en una matriz fundamentalmente arcillosa procedente de la erosión de la sierra. Estos materiales condicionan su comportamiento hidráulico, que lo define como un acuitardo (formación geológica semipermeable, que conteniendo apreciables cantidades de agua la transmiten muy lentamente, por lo que no son aptos para el emplazamiento de captaciones de aguas subterráneas, sin embargo bajo condiciones especiales permiten una recarga vertical de otros acuíferos).
A nivel general se le considera un acuífero único, heterogéneo y anisótropo. Se recarga por los interfluvios de los ríos Jarama, Manzanares y Guadarrama a partir del agua de lluvia. La descarga se produce tanto a los arroyos y zonas húmedas como a los principales ríos de la región.
A pesar de su reducida porosidad, almacena varios miles de hectómetros cúbicos de agua, lo que le otorga gran importancia como fuente de recursos. No obstante, todo este volumen no es aprovechable para el abastecimiento humano, principalmente por la calidad de las aguas a partir de cierta profundidad.

Litológicamente, y de techo a muro, este acuífero se caracteriza por presentar un paquete de potencia variable -de entre 20 y 30 m, constituido por arcillas, conglomerados y yesos de edad terciaria, por debajo del cual se encuentran las rocas carbonatadas del cretácico que lo constituyen- de permeabilidad alta-media y de hasta 150 m de espesor.
Infrayacentes a estos depósitos, la serie finaliza con unos niveles detríticos-margosos de permeabilidad media-baja.
Se comporta como un acuífero libre en zonas de afloramiento y cautivo o confinado en el resto. La recarga se produce por la infiltración del agua de lluvia en las zonas de afloramientos calcáreos y de los arroyos, provenientes de la sierra, que circulan sobre este terreno.
En la zona que se extiende entre el Pontón de la Oliva y Patones, en la que el río Jarama discurre sobre estos materiales, se produce una conexión entre este acuífero y el formado por las terrazas aluviales, que aumenta las posibilidades de aprovechamiento conjunto.

Pozos Subterráneos
Los pozos subterráneos que captan el agua de los acuíferos se dividen en generales y locales según la aportación de estos.

Pozos | |
Sistemas Generales: 54 unidades; 3.570 l/s | Sistemas Locales: 68; 1.426 l/s |
Utilización en períodos de escasez o sequía. Apoyo a zonas de la red general en caso de labores de mantenimiento, renovaciones, avería u otras contingencias. | Utilización para poblaciones de la Comunidad de Madrid (no la capital), en épocas de sequía o escasez. |
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Autor: Saúl Reula, alumno del Máster en Diseño, Construcción y Explotación de Obras Hidráulicas