¿Para qué estudiar un Máster de Estructuras Online?- Parte I

Existen algunas escenas laborales donde no le da igual a nadie que estudies, por ejemplo, un Máster de Estructuras Online.

¿Qué hay por ahí?

Lo qué se encuentra uno o una en la calle.

Las fábricas de prefabricados de hormigón tienen unas fichas técnicas de las piezas de hormigón que fabrican y que renuevan constantemente (vigas, viguetas pretensadas, viguetas armadas forjados pretensados, forjados cerámicos, pilares, casetas de transformación eléctrica…), luego, necesitan profesionales que se las modifiquen y que no suelen pertenecer a la plantilla de la fábrica, y si las proyectan con menos hormigón, alambres o armadura, pues mejor que mejor. Hay realmente muy pocos profesionales metidos en ese mundo y es por eso, que siempre son los mismos. Estas mismas fábricas contratan también con otro profesional, a veces interno y a veces externo, que realiza las labores de cálculo de las estructuras conformadas con las piezas que comercializan.

Las constructoras medianas y pequeñas, que suelen dedicar poco tiempo al cálculo y por lo tanto, no tienen a ningún profesional asignado, al comienzo de cada encargo de obra, necesita de un buen profesional que le calcule una estructura económica, fácil y rápida de construir para ahorrar costes, pues de ello depende la supervivencia de su negocio. Por lo general siempre contactan con la misma persona, porque no se molestan en buscar, ni tampoco muchas personas se ofrecen. Pero otras veces cambian de profesional y contratan con éste.

Los pequeños comerciantes de materiales sobretodo metálicos (laminados, chapa galvanizada para cubiertas, chapa galvanizada para Steel framing…) suelen vender a pequeños empresarios que compran material para ampliar su fábrica o su negocio o para cualquier otra cosa. También venden a pequeños constructores o mejor, a cuadrillas de albañiles. Muchas veces son obras que no se calculan y que por lo tanto siempre, o ponen piezas sobredimensionadas o ponen piezas con dimensiones peligrosas. Pero otras veces, estos mismos empresarios o cuadrillas contratan con algún profesional para que les calcule esas pequeñas estructuras porque comprenden que en unos casos ahorran y en otros casos se quedan tranquilos.

Los estudios de arquitectura y los estudios de ingeniería (no dedicados específicamente al cálculo estructural) suelen contratar con otros profesionales para que les calculen las estructuras de los encargos de proyectos que tienen. Por lo general, siempre contratan con la misma persona porque tampoco emplean tiempo en buscar. Pero otras veces cambian de profesional por cualquier motivo o simplemente por cambiar.

Hay pequeños y medianos empresarios y empresarias que le dan muchas vueltas a la cabeza porque quieren mejorar su producto o incluso modificarlo completamente, pero que pocas veces llegan a ver su sueño materializado por falta de conocimiento, aunque tengan mucha emoción y muchas ganas por conseguirlo. En definitiva un/a empresario/a es alguien que tiene un sueño (productivo, laboral,..) y necesita llevarlo a cabo. Son pequeñas ideas que no les dejan tranquilos, como por ejemplo podría ser, el fabricar una simple plancha de plástico para usarla como encofrado de hormigón, pero reforzado con alguna pieza metálica, que ellos nunca llegan a saber cuál sería la más efectiva ni la más económica.

Hay empresas que deciden construirse un edificio o una nave o lo que fuere. Después de esa decisión contratan la construcción con alguna constructora. Aquella empresa puede fiarse completamente del buen hacer de la constructora. Bien, pues como en esto no hay seguridad, aquella empresa suele contratar a profesionales que cuiden de que la construcción esté correcta y de acuerdo al contrato firmado. En el caso de las estructuras es algo muy bueno, porque la empresa vigilará más la adecuación de los acabados y mucho menos o nada la estructura, que es donde las cosas están ocultas y por lo tanto son susceptibles a que efectivamente se oculten errores o defectos, porque al finalizar la obra quedarán tapados. En muchas ocasiones un buen profesional contratado por aquella empresa ayuda en mucho a que aquella estructura carezca de patología.

Hay empresas poco habituales. Por lo general, siempre se calculan las cosas de la misma manera, sobretodo en estructuras simples como pudieran ser las naves metálicas. Pues bien, existen en el mercado algunos profesionales que han ideado otra forma de cálculo no usual o que utilizan unos cálculos más complejos y lo han hallado a base de probar y probar, Fruto de ello, es que hay empresas, que utilizando a esos profesionales como reclamo, consiguen aumentar su negocio, porque realmente esa otra forma más compleja de calcular, hace que sus construcciones sean más baratas y que por lo tanto se vendan más. El llegar a ese conocimiento, que está para todos pero que por su dificultad comprensiva pocos lo utilizan, les ha procurado a aquellos profesionales la oportunidad de ser muy útiles. Es decir, en la cotidianeidad, pocos profesionales utilizan cálculos complejos para resolver estructuras, pero se da el caso de que a veces al utilizarlos, si se tienen los conocimientos por supuesto, conlleva el poder trabajar con mucho constructores.