Patinetes eléctricos. Prohibición en los trenes

1.Introducción

Los patinetes eléctricos han proliferado en las grandes ciudades como alternativa de movilidad sostenible. Son un medio de transporte accesible a la gente en general, ya sea en la modalidad de alquiler o mediante la adquisición del mismo. Además, permite alcanzar velocidades de hasta 30 km/h, lo que supone que para desplazamientos que caminando puedes tardar 30 minutos, con el patinete lo puedes realizar en unos 5 minutos. Además, al ser manejables, se pueden combinar con otros medios de transporte cuando el desplazamiento es más largo y no es posible realizarlo mediante el uso del patinete. Aquí es donde entran los vehículos ferroviarios, especialmente los orientados al transporte urbano como tranvías, metros, trenes de cercanías, etc. Pero una serie de situaciones que han supuesto riesgos en la seguridad operacional ferroviaria han puesto en entredicho esta simbiosis. Por tanto, Vamos a analizar cuál es la situación a fecha de hoy y que posibles soluciones se plantean a corto y largo plazo, pero antes, echemos la vista hacia atrás y vemos desde dónde venimos…

2.Antecedentes de los Patinetes

Los patinetes eléctricos han dejado de ser una novedad reciente en nuestras ciudades y se han convertido en una parte integral del paisaje urbano. Aunque podríamos pensar que son una invención moderna, su historia se remonta mucho más atrás en el tiempo. La combinación de su naturaleza ecológica, su practicidad y su asequibilidad ha provocado un aumento vertiginoso de su uso en todo el mundo. Sorprendentemente, pocos saben que los patinetes modernos pueden rastrear sus raíces hasta el año 1895, cuando se presentaron las primeras patentes para vehículos de transporte personal eléctricos, que hoy en día conocemos como VMP (Vehículos de Movilidad Personal) y cuyo máximo exponente es el patinete eléctrico actual.

En 1915, un inventor llamado John Purdy presentó una patente para un vehículo de transporte personal eléctrico, que se parecía mucho a un patinete. Sin embargo, debido a la falta de interés en la época, este invento no tuvo mucho éxito.

En la década de 1970, el ingeniero estadounidense Gino Tsai fundó la empresa J.D. Corporation y comenzó a fabricar patinetes eléctricos plegables para su uso en fábricas y almacenes. Estos primeros patinetes eléctricos no eran muy populares entre el público en general, pero sentaron las bases para el desarrollo de futuros modelos.

A mediados de la década de 1990, el empresario taiwanés Horace Chang fundó la empresa Razor USA y lanzó al mercado el primer patinete eléctrico para uso recreativo, el Razor E300. Este modelo se convirtió rápidamente en un éxito de ventas en todo el mundo y ayudó a popularizar los patinetes eléctricos.

En los últimos años, los patinetes eléctricos han experimentado un auge en popularidad en todo el mundo. Muchas ciudades han implementado programas de alquiler de patinetes eléctricos, lo que ha hecho que sean más accesibles para el público en general. Además, muchas personas han comprado sus propios patinetes eléctricos para su uso personal, como una forma conveniente y económica de moverse por la ciudad.

3. Ventajas y desventajas de los Patinetes eléctricos

Dentro de las ventajas podemos encontrar:

• Evitar atascos. Al ser vehículos de reducido tamaño y manejables, es fácil evitar los atascos que se puedan producir en los desplazamientos por las grandes ciudades.
• Reducción de emisiones de CO₂. Al ser eléctricos, no emiten CO₂ a la atmósfera, lo cuál los engloba dentro de los medios de transporte sostenibles y amigables con el medioambiente.
• Ausencia de ruido. Los patinetes eléctricos casi no generan ruido, pues su motor eléctrico es bastante silencioso.
• Tal y como hemos mencionado anteriormente, su tamaño los hace manejables, por lo que se pueden transportar en otros medios de transporte y a la hora de guardarlos en casa ocupan poco espacio.
• Bajo coste. En comparación con otros vehículos similares, tipo bicicletas eléctricas, motos eléctricas o coches eléctricos, los patinetes eléctricos son mucho más baratos, por lo que permite que personas con menos poder adquisitivo puedan también acceder la movilidad sostenible.

En cuanto a las desventajas, las siguientes se podrían considerar las principales:

• Falta de regulación. En los últimos 5 años este medio de transporte se ha popularizado, especialmente en las grandes ciudades. Lo que comenzó como una evolución del patinete convencional, para uso de los niños, rápidamente se popularizó como medio de transporte alternativo y sostenible. El rápido crecimiento, supuso que de repente las ciudades estuviesen inundadas de este tipo de vehículos.
• Condiciones meteorológicas adversas. Por su diseño, los patinetes eléctricos no ofrecen protección cuando existen condiciones meteorológicas adversas como lluvia, granizo, nieve,etc.
• Batería. Pese a que la capacidad de carga de las baterías ha ido mejorando, la autonomía de las mismas todavía no es lo suficientemente importante como para no tener que recargar el patinete frecuentemente.

A estas desventajas, se tiene que sumar la última problemática que ha surgido con los patinetes eléctricos y que se detalla en el siguiente punto.

4. Problema de los patinetes en vehículos ferroviarios

La última empresa en sumarse a esta iniciativa ha sido Renfe, pues el pasado 27/11/2023 emitió un comunicado de prensa en el que indicaba que prohibía, a partir del 12/12/2023, el acceso a los trenes de viajeros con patinetes eléctricos. Previamente a esta medida tomada por Renfe, Metro de Madrid también emitió un comunicado en el que prohibía el acceso al metro con patinetes eléctricos a partir del 04/11/2023. Tanto Renfe, como Metro de Madrid, se han sumado a una tendencia que durante el último año se ha ido extendiendo tanto en España como en Europa.

¿El motivo?

El 04/11/2021 se produjo la explosión de la batería de un patinete eléctrico que provocó varios heridos.

El 17 /11/2022, explotó un patinete eléctrico en un coche de un vehículo de FGC (ver vídeo en el enlace de la bibliografía) dejando un balance de 5 heridos. El motivo fue la explosión de la batería, en principio por causas desconocidas.

El 18/10/2023, ocurrió un suceso similar en un coche de Metro de Madrid, de la línea 2. Esta vez no se produjeron heridos, pero los daños materiales fueron importantes (ver en la bibliografía enlace con las imágenes). Como la vez anterior, el incidente vino motivado por la explosión de la batería del patinete eléctrico.

Esto es una muestra de las situaciones de peligro que se han generado en vehículos ferroviarios como consecuencia de la explosión de las baterías de los patinetes eléctricos.

5. Análisis

Las baterías de los patinetes eléctricos son baterías de litio (Li), cuando estas baterías están dañadas o son defectuosas pueden explosionar.

Una batería de Li consta de dos electrodos separados por un electrolito. Adicionalmente, contienen una bobina de metal y un líquido de iones de litio inflamable en el que flotan pequeños fragmentos de metal. Este contenido está sometido a presión por lo que, si un fragmento de metal perfora una partición o si se perfora la batería, el litio reacciona vigorosamente con el agua en el aire lo que puede llevar a que la batería se incendie. Por ello, para evitar estas situaciones es recomendable tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Evitar almacenar a altas temperaturas.
• Evitar juntar las baterías de Li.
• Evitar sobrecargas usando cargadores inadecuados.

6. Conclusiones

Después de analizar  la información al respecto, se puede determinar que la prohibición de los patinetes eléctricos en vehículos ferroviarios obedece más a una situación de evitar un riesgo en un espacio confinado de reducidas dimensiones más que a que exista un porcentaje elevado de posibilidades de que la batería se acabe incendiando. Como se ha mencionado, las baterías de litio pueden explosionar en caso de estar defectuosas, o estar dañadas o sobrecargadas. Pero esto mismo le puede suceder a un teléfono móvil, pues utiliza la misma tecnología de baterías. Entiendo que, en el caso de los patinetes, se añade la situación de que el tamaño de la batería es mayor que por ejemplo la de un teléfono móvil y el efecto que puede provocar es mayor.

Bajo mi punto de vista, es una pena que se demonice un medio de transporte que está demostrando ser muy práctico y que está permitiendo mejorar la movilidad dentro de las grandes ciudades, pero es verdad que hasta que se pueda contar con algún tipo de tecnología que pueda permitir identificar si una batería está dañada o no, de cara a la seguridad de los viajeros es recomendable prohibir el acceso a los vehículos ferroviarios con patinetes eléctricos.

Por último, también creo que una posible medida de mitigación sería establecer unas inspecciones de mantenimiento periódicas obligatorias para los patinetes eléctricos, al igual que las tiene un coche, un tren o una moto, para que de esa manera se pudiera verificar el estado de la batería y poder anticiparse al posible fallo de la misma. Es verdad que esto supondría un sobre coste para el usuario del patinete, pero redundaría en una mejora de la seguridad colectiva que es algo por lo que se tiene que velar desde todas las partes.

Bibliografía

Origen e historia del patinete eléctrico – Blog Sabway

La historia de los patinetes eléctricos: desde sus humildes comienzos hasta el futuro de la movilidad urbana sostenible (mivehiculopersonal.com)

Patinete eléctrico: Los pros y contras que nadie te cuenta antes de comprarte uno (lavanguardia.com)

Renfe prohíbe el acceso de patinetes eléctricos en los trenes

Madrid prohibirá “provisionalmente” subir los patinetes eléctricos al metro y a los autobuses | Madrid | España | EL PAÍS (elpais.com)

Así explotó un patinete eléctrico en un vagón de tren en Barcelona (telemadrid.es)

Así quedó el vagón del metro de Madrid donde explotó la batería de un patinete eléctrico (eleconomista.es)

Explota la batería de un patinete eléctrico en Londres (rtve.es)

Why are rail companies banning e-scooters on trains? | ITV News

La razón por la que las baterías de litio se incendian y explotan (greelane.com)

Autor: José Manuel Labra. Coordinador de proyecto EEM.  Ingeniero Superior Industrial Especialidad en Electrónica y Automática. Profesional con 17 años de experiencia desempeñándose en cargos como Responsable de Control de Operaciones, Responsable de ingeniería para el proyecto de mantenimiento de la serie S130/S730 (Bombardier).