Toma de decisiones. Solo tú puedes elegir donde quieres estar

Introducción

Cada profesional posee la capacidad de elegir su propio rumbo, determinando el éxito a través de Toma de decisiones conscientes y estratégicas. No son las circunstancias las que definen el futuro, sino las elecciones tomadas en cada paso del camino.

Reconocer esta capacidad es clave para liderar con propósito y alcanzar objetivos tanto personales como profesionales.

Toma de decisiones

Muchas veces la mayoría de personas están aburridas en su empleo, hablan mal de él en su tiempo libre, se quejan de las jornadas laborales, de su jefe y hasta de sus compañeros. Amén de hablar del tráfico, cuando no se trabaja en un entorno virtual, de las malas instalaciones y las pocas oportunidades de crecimiento.

Sin embargo, cuando alguien les pregunta ¿si es tan malo, porque no lo dejas? Y entregan respuestas dispares, que van desde las deudas hasta que no han encontrado la oportunidad adecuada y un sinfín de excusas en donde no es clara la razón de fondo. Es decir no hay una Toma de decisiones.

Es aquí donde entra la opción de elegir, todos nosotros tenemos la elección de decir me voy o me quedo, no solo de un empleo sino de cualquier relación que tengamos, el tema aquí es, ¿tenemos la madurez para elegir?, es algo que debemos preguntarnos hacia nuestro interior y ser muy sinceros con nosotros mismos de identificar que realmente nos detiene o nos impulsa a tomar una u otra decisión.

Muchas veces nos creemos indispensables, olvidándonos que todos tenemos un ciclo vida útil tanto a corto como largo plazo; otras veces son realmente nuestras decisiones, buenas o malas del pasado, que no nos permite tomar la elección de irnos, que van desde tener una familia, una hipoteca, unos planes, ambiciones etc.

Satisfacción laboral en la toma de decisiones

Sin embargo, casi siempre buscamos responsables externos a nosotros mismos y no somos capaces de elegir nuestro camino, cuando la decisión al parecer es muy simple, o continuamos en este empleo en donde no me valoran, pero me permite mantener mi nivel de vida a nivel personal o familiar; o definitivamente prefiero irme y no culpar a nadie más de mis decisiones y buscar lo que realmente me de tranquilidad.

Mi estimado lector, es hora de sincerarse consigo mismo y no involucrar ni afectar a otras personas cercanas o lejanas, bien sea aceptando que el dinero no solo compra nuestro trabajo sino nuestro nivel de tolerancia a todo a lo que nos quejamos diariamente.

Si se revisan encuestas de satisfacción laboral desde los fríos números se observa una insatisfacción generalizada, no obstante, cuando se detallan y se revisan a la luz generacional, vemos como los más jóvenes y sin responsabilidades, no tienen problema de cambiar de empleo en busca de su ideal, en concordancia de su espíritu libre.

En cambio, los adultos con más responsabilidades, son más infelices porque al final del día entran en un proceso de resignación y de falta de reconocimiento a lo que viven vs lo que quisieron ser; por lo tanto, no aceptan su realidad y esto se refleja con sus constantes quejas.

Reflexiones

Desde mi perspectiva presento algunas reflexiones para que podamos tomar las riendas de nuestra vida laboral y porque no, elegir de forma planeada que es lo que realmente nos gustaría hacer.

Autoconocimiento: Reflexiona sobre tus habilidades, intereses y valores. Entender qué te motiva facilita la elección de un trabajo significativo.

Explora diferentes campos: Investiga industrias y roles que despierten tu curiosidad, incluso si parecen fuera de tu zona de confort.

Toma cursos y certificaciones: Ampliar tus habilidades a través de formación constante abre puertas a nuevas oportunidades.

Networking: Conecta con profesionales en áreas que te interesan. Las conversaciones pueden revelar opciones laborales inesperadas.

Considera el equilibrio entre vida y trabajo: Elige un camino que permita un balance entre tu vida personal y profesional.

Busca mentores: Un mentor con experiencia puede ofrecerte una perspectiva valiosa y guiarte hacia el éxito en tu campo.

Piensa a largo plazo: Evalúa cómo el rol actual o el que buscas puede contribuir a tus metas a largo plazo.

Evalúa el entorno laboral: Busca un lugar donde la cultura organizacional esté alineada con tus valores personales.

Revisa tu satisfacción: Si el trabajo actual no te llena, considera una transición gradual a un campo que te entusiasme más.

Sé flexible: Acepta el cambio y las oportunidades inesperadas. A veces, el mejor camino no es el más evidente al principio.

Conclusiones

Elegir el mejor camino laboral es un proceso continuo que requiere autoconocimiento, exploración y flexibilidad. Tomar decisiones conscientes, basadas en tus habilidades, intereses y valores, te permitirá encontrar un trabajo que no solo te brinde éxito profesional, sino también satisfacción personal.

Con una mentalidad abierta y el apoyo adecuado, puedes construir una carrera alineada con tus metas y aspiraciones a largo plazo.

Autor: Edward Celis, PMP, PMP Trainer, MBA, experto en gerencia de proyectos y profesor del módulo Equipos de alto rendimiento en la Dirección de Proyectos.